sábado, 28 de noviembre de 2009

Homenaje en S. Pedro Noviembre de 1996

Hace 13 años, un 9 de Noviembre de 1996, se realizo un sencillo y sincero homenaje a las Brigadas Internacionales. Este tributo realizado en frente del monasterio de San Pedro de Cardeña. Fue organizado por colectivos y asociaciones de la izquierda, fuera del arco parlamentario. Aunque a título individual acudieron dirigentes de sindicatos y algún partido político.

Acudieron al acto unas 400 personas, banderas Castellanas y Republicanas arroparon la fiesta solidaria. Canciones Republicanas de fondo, poemas de Miguel Hernández en boca del juglar Guti, lectura por parte de Doris Benegas de cartas de presos "rojos". En estas cartas describían sus penalidades en prisión o su último adios antes de ser fusilados.

El cristo de San Pedro por un día fue republicano y lució una bandera tricolor en su mano. Lo que le costo una fisura en un dedo.

El homenaje estaba previsto para las 12 h. Un anterior homenaje en Gernika que se retrasó, produjo que la familia de un Brigadista de la Lincoln llegara a las 14:45 h. Ya solo quedaban 100 personas que les agradecieron el esfuerzo, solidaridad internacionalista y la sangre derramada.
La mujer de John C. Blair, fallecido en 1984, Harriet Blair, sus dos hijos y una nieta visitaron el lugar muy emocionados. Harriet agradeció el recibimiento en su nombre y en el de todos cuantos allí estuvieron confinados.
Se colocó un monumento en el que se depositaron decenas de ramos de flores. En la placa de este recordatorio se podía leer "El pueblo de Burgos en agradecimiento a los y las Brigadistas Internacionales que dieron su vida y su ser por la República y la Libertad". Este monumento realizado desinteresadamente por miembros del Colectivo El Averno, fue retirado dos días después. Suponemos por parte de la Diputación o del Arzobispado. Un acto vergonzoso por ocultar este campo de concentración. Más aún, cuando la Diputación pidió presos para arreglar carreteras y otros trabajos. Como la entrada al monasterio y la carretera a Cardeñadijo.
No existe ninguna placa, mural, etc, que explique lo que entre estas paredes ocurrió. Los fusilados y muertos en este campo de concentración,enterrados en una fosa común, no constan en un obligado recordatorio. Muchos todavía enterrados en los exteriores de los muros del monasterio.
Mientras en la Catedral de Burgos, el edificio de Capitania Militar y en decenas de otros monumentos que llenan la provincia de Burgos, llevan puestas leyendas haciendo apología de la dictadura fascista y asesina.
¡NO PASARÁN!

domingo, 15 de noviembre de 2009

Una biblioteca Anti-marxista en San Pedro

Foto de la biblioteca actual.



El tener un libro en San Pedro, no de caracter fascista, fue un lujo. Varios presos consiguieron introducir, tras su detención, varios libros en inglés. Uno era "Lawrence de Arabia", que principalmente estuvo en la planta de los Británicos. A cuenta de este libro, hubo muchos debates entre los presos por la posición Británica y Alemana en el cercano Este.
También hubo risas por un libro de Wodehouse, publicado en 1934, su primera novela de Bertie y Jeeves, Thank you, Jeeves. Normalmente eran leídos en voz alta en grupos de 15. Aproximadamente durante una hora y cada día por un preso distinto.

También se dió el caso de un preso Americano que, todavía con su reloj de pulsera, consiguió un intercambio. A través de otro preso internacional, con buenas amistades con los guardias, hizo un trato con un soldado. Este soldado se había fijado varias veces en su reloj. Finalmente, cambió su reloj por el Quijote de Cervantes. Este brigadista, recuerda que con el "Quijote" paso momentos magníficos.

La posición de las autoridades franquistas era de continuar con la reeducación de los prisioneros. Por eso la creación de una biblioteca para prisioneros extranjeros, principalmente con textos anti-marxistas o fascistas.

Estas son las instrucciones y el reglamento, actualmente en el Archivo Militar General de Avila:

Instrucciones para la creación y reglamentación de la biblioteca para prisioneros extranjeros en el Campo de Concentración de San Pedro de Cardeña.

1º Se procede a crear una Biblioteca para Prisioneros Extranjeros, la cual se formará con los libros y material de Propaganda que hasta el presente se poseen y con aquel que en lo sucesivo, ya sea por aportaciones Oficiales o privadas previa aprobación de esta Inspección, se vayan recibiendo.

2º Para el cuidado de la Biblioteca, se nombrará por el Jefe del Campo a uno de los prisioneros que por el conocimiento de varios idiomas y por su comportamiento y antecedentes sea apto para ello. A ser posible un Bibliotecario de profesión.

La supervisión de la Biblioteca, correrá a cargo del Jefe del Campo y del Capellán del mismo.


3º De acuerdo con el horario establecido, se determinará por el Jefe del Campo, el tiempo dedicado a la lectura, que puede ser de 1 a 2 horas diarias, repartidas entre la mañana y la tarde.


4º Dada la variedad de nacionalidades, se nombrará un "Lector" para cada una de ellas, el cual procederá a la lectura diaria de algún capítulo, de los volúmenes escojidos a tal efecto, que serán preferentemente aquellos que traten de las Obras realizadas por el Régimen Fascista u Anti-marxistas para los de aquellas Naciones donde este instituido dicho Régimen.

Esta clase de lectura, se efectuará en la primera parte de la hora u horas determinadas.

En la segunda los prisioneros podrán leer libros particularmente y a su libre elección, que devolveran una vez terminado el tiempo concedido al Jefe del Grupo, que puede ser el mismo Lector, que a su vez lo hará a la Biblioteca, en presencia del prisionero Bibliotecario.


5º Diariamente y terminada la hora de lectura, el Bibliotecario, pasará revista, de cuyo resultado dará cuenta al Jefe del Campo.


6º Se procurará conservar los libros en buen estado y se castigará con la supresión de su uso a aquellos prisioneros que muestren desidia o mala intención al tratar los libros.


7º La lectura podrá efectuarse tanto en local cerrado que puede ser el mismo que se destine para Bibliotecario al aire libre si el estado del tiempo lo permite.


8º La Biblioteca se dividirá por Nacionalidades, a los efectos de mejor colocación de los volúmenes, facilitando escoger los mismos por los distintos Grupos.


9º Los volúmenes irán numerados correlativamente y se llevará de ellos un índice General.


10º Mensualmente se remitirá a esta Inspección, por el Jefe del Campo, un estado numérico de los volúmenes con que cuente la Biblioteca y expresión de las materias de los mismos


Burgos 10 de Agosto de 1938
III Año Triunfal

El Coronel Inspector

Luis de Martín Pinillos

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Canto de un ruiseñor


El canto de un ruiseñor en una noche española

despertó a un prisionero de guerra.

¿Quién canta y cuál es su intención?

Apreté mi cabeza contra los barrotes

¿Podría estar cantando a un compañero cercano,

o expresando su amor a las estrellas?


Cincuenta años han venido y se han marchado.

El autor no puede olvidar ese canto,

pese a estar lejano,

capturado por la belleza, que nunca molesta,

mientras saboreaba cada nota.


Olvidando las tristes galerías de la prisión,

no escuchando las voces de alerta de los guardias,

la fantasía me llevó lejos,

y con tan breve ocasión para soñar

elegí a mis seres queridos y mi hogar.


La canción acabó muy pronto.

Mi corazón agradeció al amigo invisible

por compartir su amor en una noche de luna

mientras otros dormían, esperando la luz.


Frank J. Blackman, prisionero Canadiense nacido en Edmonton(5-3-1913), hizó este poema en 1989. Inspirado en su internamiento en el campo de concentración de San Pedro de Cardeña en 1938-1939. Fue capturado,era el 1 de Abril de 1938. Llego a San Pedro el 8 de Abril junto con la expedición de 290 Internacionales desde Zaragoza. Más tarde a la prisión de Ondarreta en Marzo de 1939 y fue canjeado en el grupo de 31 Canadienses el 5 de Abril de 1939 a Francia.

Foto: Brigadista Canadiense MacPap

lunes, 2 de noviembre de 2009

Bob Doyle,un rebelde Irlandés

El pasado 22 de Enero falleció en Londres Bob Doyle, a sus 92 años de edad. Nació en Dublín en 1916. Era el último de los voluntarios irlandeses de la legendaria XVª Brigada que quedaba vivo.


Brigadistas Irlandeses en Diciembre de 1936

Perteneció a la Columna Connolly unidad Irlandesa de la 1ª compañía de la XV Brigada. Esta unidad se creó a finales de 1936 con la llegada de 80 Irlandeses, principalmente de Belfast. Dirigida por Frank Ryan, el prisionero más importante de Franco y detenido junto a Bob. 71 de los cerca de 300 voluntarios irlandeses que participaron en las Brigadas Internacionales cayeron en el frente de guerra, entre los que sobrevivieron muchos fueron hechos prisioneros. Bob llegó a finales de 1937, “Cuando yo vine lo hice cruzando los pirineos,vinieron 17 conmigo,eran Alemanes,Italianos y todos cruzando al mismo tiempo.”

Detenido por tropas fascistas Italianas el 31 de Marzo de 1938 cerca de Calaceite. Bob Doyle fue encerrado en el monasterio de San Pedro de Cardeña el 8 de Abril procedente de Zaragoza. San Pedro uno de tantos lugares que los franquistas convirtieron en campo de concentración. Allí fue torturado por falangistas e interrogado por los servicios secretos alemanes de la Gestapo nazi, llegaron incluso a simular su ejecución… Las marcas de los golpes en su espalda de Bob, asustaron al periodista Americano William Carney. El cual en una visita a San Pedro el 9 de Julio de 1938, intentó machacar la reputación de las Brigadas Internacionales. Parecía escéptico sobre las palizas, pero lo vio con sus propios ojos.

Foto de prisioneros en San Pedro de Cardeña. En primer plano Republicanos, Gudaris, Milicianos... y separados por unas filas vacias junto a la pared sur, Brigadistas Internacionales.

Bob recordaba así la izada de bandera: “ Haciamos el saludo así (con los dedos extendidos del todo) y cualquiera la tenía así (con el puño medio cerrado),porque venían con el palo y te pegaban.” En una decisión de la organización clandestina de prisioneros, con objeto de evitar los golpes, se decidió hacer el saludo fascista. Pero se guardaron una bala en la recámara. Con motivo de una visita en Septiembre del 38 de Lady Chamberlain, viuda del exministro de exteriores Austen Chamberlain, se destapó la sorpresa. Todos los prisioneros Británicos y Irlandeses fueron confinados en el área de asambleas. Hicieron varios ensayos antes de la llegada de L. Chamberlain, en formación y recordando que no habían olvidado hacer el saludo fascista. A su llegada el sargento gritó: “¡Atención! ¡Firmes!”, volvió a repetir la orden. Pero ningún brazo se alzó. El comandante y sargento enrojecieron de furia. L. Chamberlain paso revista y pregunto a muchos por qué habían venido a España. A lo que respondían: “Para detener el fascismo antes de que llegue a Inglaterra”. Algo que no esperaba escuchar. Al ver que todos respondían lo mismo dejo de preguntar.

El 23 de Enero de 1939 fueron conducidos todos los Británicos, Irlandeses, Canadienses y Suizos fueron conducidos a una prisión en San Sebastian. Por las calles de San Sebastian fueron acompañados por un sentimiento humano maravilloso. Les dieron cigarros y chocolate ese Pueblo Vasco solidario con sus defensores. Después de estar en la Prisión de Ondarreta fueron intercambiados por 110 prisioneros Italianos, en manos de la República en Gandía. Finalmente el 5 de Abril de 1939, fueron liberados en el puente internacional de Irún.

Antes de alcanzar Londres, Bob Doyle, John Lennon y Maurice Levitas, fueron a París a ver al Embajador Irlandés. Con el verdadero propósito de buscar ayuda para algunos Alemanes de San Pedro, los cuales tenían amigos en París. Cuando llamarón a la puerta de ese amigo, una mujer la abrió, llevando un aspecto con las cabezas rapadas, gafas rotas, jersey azul y un mono viejo, cerro de un portazo la puerta. Pero gritaron el nombre de un prisionero Alemán y la puerta entonces se abrió con una calurosa bienvenida. Los tres llegaron a Londres sobre las 6 de la siguiente mañana. Tenían solo Francos Franceses y ninguna tienda de cambio estaba abierta. Un café usado por taxistas rehusó servirles el desayuno en Francos Franceses. Pero los taxistas,los cuales se enteraron de su parecido a los prisioneros que habían llegado el día antes, les proporcionaron unos magníficos desayunos, así como cambio para el teléfono.

Bob Doyle se puso inmediatamente a colaborar con el Partido Comunista para crear una red clandestina de resistencia antifranquista. Se casó con Lola, una mujer asturiana, y se asentaron en Londres. Nunca ha dejado de participar en todo tipo de causas solidarias, movimientos de izquierdas y luchas anticapitalistas: en defensa de la clase obrera, iniciativas contra el bloqueo a Cuba, a favor de la revolución bolivariana de Venezuela, movilizaciones contra la guerra de Irak, protestas antiglobalización e incluso a favor de la legalización del cannabis. Bob Doyle también ha sido un asiduo de las celebraciones de homenaje a las Brigadas Internacionales, tanto en el Estado español como en Irlanda. En su última intervención antes de su muerte, en el homenaje a los milicianos antifascistas caidos en la Batalla del Jarama, se despidió con estas palabras:


“¿Sacrificaron en vano sus vidas mis camaradas?” La respuesta dependerá de Uds. Tomen la lucha y únanse en la larga batalla por la más noble de las causas: la liberación de la humanidad. Entonces, el sacrificio de mis camaradas no habrá sido en vano; habrá sido una fuente de aliento. LA LUCHA CONTINÚA.”

Homenaje en Dublín,14 de Febrero de 2009

Bob Doyle, además de un símbolo de la solidaridad internacionalista que representa aquella generación, es un símbolo del idealismo y del compromiso, una referencia para todos los que reivindicamos la memoria histórica democrática y antifascista como una herramienta del presente para construir un mundo más justo.
Fuentes:
Declaraciones en el reportaje de TV “La Batalla del Jarama”
Otras fuentes y archivos del autor del blog
Los libros:
Bob Doyle “Memorias de un rebelde sin pausa”
Carl Geiser “Prisoners of the Good Fight"
http://www.geocities.com/irelandSCW/ibvol-BobDoyle.htm

Bob was the last surviving Irish combatant on the Republican side of the Spanish Civil War when he died.Bob Doyle passed away in London on Thursday, aged 92, after a short illness.
Doyle was born in Dublin on February 12, 1916, shortly before the Easter Rising, and became politically active himself in the 1930s, joining the IRA after being beaten up in street fights with the Blueshirts which left him with permanent damage in one eye.But he quickly became more interested in social issues and, in 1937, decided to volunteer for the International Brigade, motivated in part by the fact that his former flat-mate Kit Conway had been killed in action at the Battle of Jarama on Doyle's 21st birthday.He was foiled in his initial attempts, arrested and expelled from Valencia after he had stowed away on a boat. Undeterred, he eventually made it back to Spain later that year by crossing the Pyrenees.
Initially deployed to train new volunteers, as a result of his IRA experience, he disobeyed orders in order to join a group heading for the front line. After engaging in battle at Belchite, he was taken prisoner by Italian fascist troops on the Aragon front in March 1938, along with Irish International Brigade leader Frank Ryan.He was imprisoned for 11 months in a concentration camp established in the disused monastery of San Pedro, near Burgos, where he was regularly tortured by Spanish fascist guards and interrogated by the German Gestapo and, once, taken out to be shot.Released as part of a prisoner exchange deal, Doyle enlisted in the British Merchant Navy for the duration of the Second World War before settling in London with his Spanish wife Lola.
Active until the very end, Doyle was a regular visitor to both his native Ireland and to Spain for International Brigade commemorations and, in 1996, along with all other survivors of the Brigades, was offered Spanish citizenship. He delivered his last speech at the rededication of Belfast’s International Brigade memorial on November 8.
He published an account of his experiences in Brigadista – An Irishman's Fight Against Fascism in June 2006, launched by Michael D Higgins and Ronnie Drew.
Since Michael O'Riordan's passing in May of that year, Doyle had been the last surviving Irish combatant in the International BrigadeBob Doyle is survived by his sons Bob and Julian, grandchildren and great-grandchildren.